La legisladora Graciela Ocaña se refirió a la situación de los “trapitos”. Además pidió “empleados públicos laburando” y “policía que no sea parte de estas mafias”.
De esta manera, la diputada de Confianza Pública se sumó al debate por la actividad de “trapitos”, reinstalado una vez más luego de que un empleado municipal de San Martín agrediera a un automovilista por negarse a pagarle a cuidacoches.
“En la Legislatura apoyamos tratar el tema trapitos”, sostuvo y apuntó que “bloques como el FpV se negaron”.
Para la legisladora “el caso de San Martín muestra claramente el manejo de esta mafia”.
Además, se refirió a la connivencia entre política, policía y barras bravas: “La policía que no protege (¿y recauda?). Un funcionario público que cumple múltiples tareas (regentea el negocio, pensamos que también a barras bravas de algún equipo de fútbol) pero el sueldo de esta persona es pagado por todos nosotros y los trapitos son mano de obra de este sistema”.
Ocaña afirmó también: “la política terminará con mafias y corrupción”. “Para construir una nueva Argentina necesitamos que el derecho de todos sea respetado. Queremos empleados públicos laburando y policías que no sean parte de estas mafias”, concluyó.