Su pasado se encuentra vinculado casi totalmente con la de su vecino Chacarita, habiendo formado parte de lo que fuera la célebre Chacarita de los Colegiales.
El crecimiento de la ciudad dividió en dos barrios las antiguas tierras que conservan no obstante su nomenclatura primitiva.Precisamente su nombre proviene de los alumnos que allí iban a disfrutar de sus vacaciones.
Hoy Colegiales crece al ritmo de sus barrios limítrofes, el ya nombrado Chacarita, Belgrano y Palermo, con los cuales en menor medida se confunde en un pasado común.
Hoy una de sus principales atracciones en la plaza Mafalda que fue restaurada por el Taller de Laura Delgado y el Museo de Humor Grafico Diogenes Taborda.
El 28 de noviembre de 1995 se inauguró, en la manzana delimitada por las calles Concepción Arenal, General Martínez, Conde y Santos Dumont, en el barrio de Colegiales, de la Ciudad de Buenos Aires, la “Plaza Mafalda”, como una forma de honrar al popular personaje en un lugar público y de esparcimiento.
Casi diez años después, el 21 de Agosto de 2005, el jefe de gobierno Aníbal Ibarra remozó el espacio verde, caracterizando el paseo con los inolvidables personajes de Quino.
La idea original de Aníbal Ibarra y del Secretario de Cultura Gustavo López era recrear a Mafalda con esculturas de resina epoxi, pero Quino, se opuso a que las mismas se realizaran, ya que no deseaba ver a su personaje en versión tridimensional o dibujado sobre colores que no fueran primarios.
Así fue como el autor prefirió aportar sus propias viñetas, y encargó a Julieta Colombo, su representante en el país, para que supervise las tiras más adecuadas a reproducir.