Marcela Millán, Defensora General Ministerio Público de la Defensa de CABA, analiza las condiciones de detención en la Ciudad.
La Defensa Pública debe velar por las condiciones dignas de detención de quienes están privados de libertad en la Ciudad. Por eso, en junio de 2020, para atender la situación de emergencia en el contexto del ASPO. El MPD presentó un Hábeas Corpus Colectivo Correctivo para proteger los derechos de las personas privadas de su libertad en flagrancia a disposición del Poder Judicial de la Ciudad.
La situación en la pandemia
En marzo de 2020, por la situación epidemiológica del COVID-19, el Servicio Penitenciario Federal restringió la admisión e ingreso a los establecimientos penitenciarios. Además, suspendió y suspendido el ingreso de personas detenidas en las Unidades 28 y 29. La adopción de esta medida tuvo como consecuencia el ingreso de detenidos al Centro de Alojamiento de Contraventores de CABA y a las alcaidías a cargo de la policía local. Siempre a la espera de un traslado posterior a los establecimientos penales correspondientes.
De este modo, las comisarías y alcaidías de la Ciudad pasaron a alojar tanto a los detenidos/as en flagrancia, como a los procesados y condenados. Sin embargo, las viejas comisarías y las alcaldías, improvisadas como sitios de alojamiento prolongado, superaron el número de lugares disponibles.
Una de las más graves consecuencias de esta situación es que el colapso de los sitios de alojamiento significó un empeoramiento de las condiciones de detención. Y a su vez, este retroceso impactó directamente sobre la seguridad, integridad y salud de las personas detenidas. Además, se agravó el riesgo de sufrir violencia institucional, en tanto la custodia quedaba en manos de los mismos agentes que actuaron al momento del hecho o detención. Esto echaba por tierra uno de los principales méritos del sistema de alcaldías: la persona detenida pasa a custodia de agentes especialmente formados.
Hábeas Corpus
La presentación del Hábeas Corpus realizada por este MPD quedó radicada en el Juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas Nº 3, a cargo de Carla Cavaliere. Tanto en primera instancia como en las instancias superiores, los tribunales hicieron lugar a las peticiones del MPD. La jueza de grado dispuso implementar una “Mesa de Aproximación de los Actores del Sistema” bajo el monitoreo del Juzgado. Esto contó con la participación de las organizaciones que se constituyeron como amicus curiae. De esta manera, se buscó elaborar e implementar protocolos de acción que permitan:
a) desalojar de las Comisarías de la Ciudad a las personas detenidas en cualquier situación.
b) que la detención en las alcaidías se cumpla en la forma en que venía realizándose antes de la pandemia. Evitando la permanencia de aquellas personas privadas de la libertad bajo condena o prisión preventiva.
Más allá de los actos procesales mencionados, la actividad de la Mesa de Aproximación de los Actores del Sistema y la del juzgado, a través de audiencias de control, continuó en forma periódica y constante durante todo el transcurso del proceso.
Lo actuado en 2023
Este año, la Defensa Pública solicitó que se tenga en cuenta la situación de detención de las mujeres cis y trans en las alcaidías de la Ciudad. En esta oportunidad, el Juzgado resolvió: “I) disponer que una vez convalidada la detención de una mujer cis o trans, esta deberá tener inmediato ingreso en la Alcaidía 1 de la Policía de la Ciudad, o en otra que se determine, con cupo exclusivo para dichas personas”.
Por otra parte, a partir del acuerdo de la Mesa de Aproximación de los Actores del Sistema, la jueza interviniente resolvió el traslado paulatino de todas las personas condenadas alojadas en las alcaidías y comisarías de la Policía de la Ciudad a las Unidades del Servicio Penitenciario Federal, con fecha límite el 31 de julio de 2023.
A pesar del trabajo continuo del Juzgado actuante y de la Mesa de Aproximación de los Actores del Sistema, no se lograron mejoras. Ya que el número de detenidos/as en las alcaidías y comisarías de la Ciudad, lejos de disminuir, se incrementó durante estos tres años. En la actualidad, alcanza un promedio diario, superior a 1300 personas alojadas.
Sin embargo, este Hábeas Corpus Colectivo y la creación de la Mesa, demuestran la importancia de generar un ámbito dinámico, participativo y colaborativo. Asimismo, ponen de relieve la preocupación permanente de todos los actores intervinientes por las condiciones de detención y alojamiento de las personas privadas de la libertad en la CABA”.