El terreno poligonal tiene diez mil metros cuadrados. En el lugar sólo quedaron de pie paredes de los frentes de algunos inmuebles que fueron demolidos desde mediados de 2010.
Es allí, en la Comuna 3, en el límite entre Balvanera y San Cristóbal, donde inversores privados, con el visto bueno del gobierno porteño, proyectan levantar un microestadio multiprósito cubierto.
La idea consiste en la construcción de una arena para 18 mil personas, de forma oval y con tres bandejas de tribunas.
El complejo tendrá tres subsuelos como cocheras, locales comerciales en buena parte de su perímetro, y contempla además una conexión directa desde un hall distribuidor con la estación Venezuela de la línea H de subtes.
La idea es que las desconcentraciones de gente después de cada evento afecten lo menos posible el tránsito en la zona.
El diseño arquitectónico estará a cargo del estudio Bodas-Miani y la obra demandaría al menos tres años.
Desde Bolívar 1 dicen: “La idea está avanzando muy bien dentro de la Ciudad. Mauricio Macri está muy interesado en su concreción, sobre todo porque es una iniciativa privada y no le demandaría ningún gasto a la Ciudad”.
El desarrollo de un microestadio multieventos que sirva como vidriera nacional e internacional para la Ciudad, es una idea que el jefe del Ejecutivo porteño siempre tuvo en mente pero nunca pudo concretar.
Si bien prosperó el desarrollo de un playón en el Parque de la Ciudad para recitales al aire libre, fracasaron otras iniciativas privadas, como la que impulsaba Fenix Entertainment Group en tierras que la Obra Social de Buenos Aires (Obsba) tiene en Núñez.
El proyecto, el primero de su tipo en el país, está comandado por la productora musical AKE Music, cuyo titular es Aquiles Sojo.
De importante trayectoria en el segmento del show business, la empresa fue la que organizó en el país los últimos recitales de Guns N’ Roses, Laura Pausini, Rick Astley, Marco Antonio Solís y Tony Bennett, entre otros.
Para el desarrollo del proyecto, Sojo estaría tramitando un préstamo de 130 millones de pesos en el Banco Ciudad. Otra parte de la inversión que requiere el desarrollo correría por cuenta de una empresa de gaseosas ligada al mundo de la música. De hecho, el objetivo es que la marca acompañe el nombre del futuro estadio ubicado en la Comuna 3.
“El sponsoreo es una pata fundamental en este tipo de proyectos. En Santiago de Chile y en Munich, por ejemplo, dos estadios utilizaron la modalidad del patrocinio para su construcción”, aseguró una fuente vinculada a las operaciones.
Otro de los elementos que apuntalan el proyecto es la buena accesibilidad que ofrece el lugar. Además del subte, la cercanía de Plaza Miserere y las avenidas que rodean el estadio servirían para una rápida desconcentración de los asistentes a los eventos.
En esta sentido, desde el Ministerio de Desarrollo Económico apuntalan el proyecto: “Es una idea que repercutiría de lleno en el reposicionamiento de la actividad económica de la zona”.
Un vecino de la zona sostiene: “Esperamos se defina pronto esta situación de la manzana. A partir de las 18 se ven cada vez más arrebatos, robos y prostitución en estas cuadras”.
Antes de que la manzana fuera demolida, la superficie era ocupada en su mayoría por edificaciones de dos y tres pisos que fueron tomadas. Ahora, dentro del predio sólo hay un pequeño obrador y una habitación de material que ocupa un vigilador privado.