El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires salió al cruce del ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, que este viernes aseguró en una conferencia de prensa que la administración de Horacio Rodríguez Larreta había habilitado una protesta de productores rurales convocada para mañana sábado.
El encargado de responder fue el ministro de Justicia y Seguridad porteño, Marcelo D’Alessandro, quien sostuvo: “Los derechos no se autorizan y en la Ciudad las reglas son las mismas para todos: el derecho a reclamar y peticionar a las autoridades está en la Constitución Nacional. Nosotros no podemos prohibirlo, pero estamos trabajando para ordenarlo y garantizar que ese derecho no colisione con el derecho a circular de las 3.000.000 de personas que viven en CABA y los otros 3.000.000 que ingresan diariamente”.
Este viernes, el ministro de Seguridad del gobierno nacional, Aníbal Fernández, convocó a una conferencia de prensa en Casa Rosada para informar que D’Alessandro le había informado que la concentración de los productores agropecuarios había sido autorizada por el gobierno porteño. Además, dijo que sólo se ocuparían de la seguridad de la Casa Rosada, de la Catedral y de otros organismos públicos pertenecientes a la administración pública nacional.
En el gobierno porteño dicen que el alcance del diálogo fue otro. Si bien los funcionarios tienen buena relación y suelen hablar para coordinar cuestiones de seguridad, el ministro porteño habría aprovechado el llamado de Fernández para recriminarle por la inacción de fuerzas federales en los piquetes promovidos por organizaciones sociales cercanas al Gobierno: “Cuando te pido que nos ayuden con los piqueteros en los puntos de acceso que son custodiados por ustedes, me decís que no podés; ¿ahora vas a prohibir el ingreso de los tractores?”.
En el gabinete de Rodríguez Larreta creen que Fernández apeló a esta estrategia comunicacional para bajarle el tono a sus declaraciones de anoche en un canal de televisión en donde señaló que no permitiría el ingreso de tractores a la Capital Federal.
La advertencia fue contraproducente: enojados, los organizadores de la protesta no sólo confirmaron que habrá tractores en Plaza de Mayo, sino que muchos de esos vehículos comenzaron a ingresar este mismo viernes a la Ciudad.
El jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, también se refirió a la cuestión. En declaraciones radiales planteó: “Desde la ciudad como siempre vamos a trabajar para que se garantice la circulación y que se pueda llevar adelante la manifestación del campo afectando lo menos posible”.Y agregó: “No se trata de autorizar o no, nosotros respetamos el derecho a manifestarse y trabajamos para que también se garantice el derecho a circular”.