Aniversario de la Ciudad de Buenos Aires

Las y los porteños celebran el 441º aniversario de la segunda fundación de Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El 11 de junio de 1480 Juan de Garay colocó el rolo de fundación donde actualmente está la Plaza de Mayo y la bautizó como Ciudad de la Trinidad y Puerto de Santa María de los Buenos Ayres.

En un terreno junto al Río, cuyas aguas llegaban en ese entonces a lo que es hoy la traza Leandro N. Alem – Paseo Colón, se instaló el fuerte donde actualmente se erige la Casa de Gobierno, en tanto que a su alrededor se entregaron terrenos para los colonos y los religiosos.

Meses después los primeros pobladores eligieron al Patrono y Protector de la antigua aldea a través de un sorteo del que surgió el nombre de San Martín de Tours, obispo, pastor, monje y apóstol de las Galias que vivió en el siglo IV.

Antencedentes
La ciudad de Buenos Aires tuvo dos fundaciones. La primera tuvo lugar en 1536 y fue realizada por Pedro de Mendoza. La segunda fue llevada adelante por Juan de Garay en 1580. Éste había partido en Abril de 1573 junto a cien hombres al frente de una expedición desde Asunción. Al llegar, el 11 de Junio de 1580, estableció la Ciudad de la Santísima Trinidad y Puerto de Santa María del Buen Ayre.

A partir de entonces se produjo el reparto de tierras entre muchos de quiénes lo acompañaban y se estableció el Cabildo de Buenos Aires. Desde el punto de vista estratégico, las aguas poco profundas del Rio de la Plata ofrecían a los nuevos habitantes una defensa natural contra las naves enemigas, dado que no permitían la llegada directa de éstas a tierra firme.

Para principios del siglo XVII, Buenos Aires estaba constituida por doscientas cincuenta manzanas rectangulares, contando con un fuerte, tres conventos y varias casas de barro y paja. Ya para mediados del mismo siglo, la población de la ciudad se estimaba en tres mil habitantes. La lejanía con los grandes centros urbanos y comerciales implicó, durante un buen tiempo, la falta de todo tipo de recursos.

En 1776 se crea el Virreinato del Rio de Plata y Buenos Aires pasa a ser su capital. Como ciudad portuaria, permitía una vía de comunicación fluida hacia España a través del Atlántico. A partir entonces, Buenos Aires se vio favorecida en su desarrollo, gracias al incremento del comercio y la relevancia en términos administrativos. La ciudad se convirtió así en la principal proveedora de productos importados en el interior del país y la región pampeana incrementó la exportación de productos ganaderos.