El gobierno de la Ciudad presentó esta semana un proyecto de “transformación de la educación” que incluye la creación de una “Universidad de formación docente” y desde el gremio Ademys denuncian que la propuesta supone cerrar los todos los profesorados, los cuales tienen autonomía y mecanismos de cogobierno como los Consejos Directivos.
Al respecto, Jorge Adaro secretario general de la entidad señaló: “Así el gobierno pretende liquidar instituciones como las Escuelas Normales que, en algunos casos, poseen más de 140 años de existencia. Se pretende centralizar políticamente la currícula y controlar su funcionamiento de manera sumamente autoritaria”.
Sobre el argumento del gobierno que sostiene que esta reforma es necesaria por la falta de docentes, Adaro retruca: “El PRO gobierna la Ciudad hace diez años, la merma en la cantidad de docentes es fruto del vaciamiento de la educación publica, la falta de salarios dignos y las reformas de los planes de estudios que imposibilitan la cursada. No falta vocación como dicen, el problema es que en la docencia hay salarios de pobreza, un maltrato permanente y condiciones paupérrimas para enseñar y aprender. En nuestras escuelas faltan equipos de apoyo, faltan recursos”.
Desde Ademys rechazan este nuevo anuncio ya que “la disolución de los terciarios implica pérdida de puestos de trabajo, el vaciamiento de la currícula de formación tanto en contenidos como en calidad y se limita el presupuesto”. Para organizar este rechazo convocan a toda la docencia a una asamblea abierta que realizarán el lunes 27 a las 17.30 en la Escuela 13 DE 6 en Urquiza 227.
