El bloque de diputados del Frente Para la Victoria en la Legislatura porteña presentó un proyecto de ley que busca “terminar con la mafia de los trapitos”, según indicaron los impulsores.
El mismo establece una “prohibición taxativa para ejercer la actividad sin autorización legal”, al tiempo que crea un Registro de Cuidacoches que incluirá a personas en situación de vulnerabilidad.
La iniciativa parlamentaria se suma al paquete de expedientes que existen en la Legislatura de la Ciudad frente al debate en torno a los denominados “trapitos”, entre ellos uno del PRO que los prohíbe y propone penas y multas económicas a quienes incumplan con la norma y otro de ECO que contiene un “régimen de excepción para personas en situación de vulnerabilidad mediante su incorporación a un programa de inclusión social”.
Según explicaron los autores del proyecto, la iniciativa “establece una prohibición taxativa para ejercer la actividad sin autorización legal, al tiempo que endurece las penas cuando dicha actividad se lleva a cabo en eventos masivos y en zonas de concentración gastronómica”.
También plantea la creación de un Registro de Cuidacoches que incluye a personas en situación de vulnerabilidad y da intervención al Defensor del Pueblo y a ONG’s que tendrán a su cargo el control y auditoría de la asignación de permisos.
Los permisos se otorgarán por el plazo de dos años con la posibilidad de renovación por un período más, podrán registrarse personas mayores de 16 años y las jornadas laborales no podrán exceder las ocho horas, excepto en el caso de jóvenes de 16 y 17 años.
Y establece que no podrán otorgarse permisos a personas con una misma identidad de género en más del 70 por ciento durante los primeros tres años.
“El proyecto prohibicionista del PRO beneficia a las mafias, ya que necesitan de la ilegalidad para montar su negocio. El que impulsamos desde el Frente Para la Victoria busca distinguir entre mafias y personas que recurren al cuidado de vehículos como una forma de subsistencia”, consideró el titular del bloque, Carlos Tomada.
“Nuestra iniciativa apunta a evitar los abusos que sufren los conductores que hoy son víctimas de la extorsión de estas mafias. Al tiempo que protegemos a los vulnerables que todavía necesitan ejercer esta actividad”, agregó.
Por su parte, su compañero de bancada Gabriel Fuks dijo que “cabe destacar nuestra disposición al debate y nuestra necesidad de dar una solución a esta problemática”.
Andrea Conde, diputada por el FPV-Nuevo Encuentro y presidenta de la Comisión de la Mujer, Infancia, Adolescencia y Juventud, consideró que “prohibir la actividad no sirve para erradicar a las mafias que se dedican a ésto. La regulación desde el Estado, en cambio, es la mejor forma de combatirlas”.