Diputados porteños protagonizaron la semana pasada un cruce de opiniones en el marco del tratamiento de dos leyes impulsadas por el PRO sobre la urbanización de villas de la Ciudad.
“Para el PRO urbanizar es pensar sólo en función de una regularización dominial mientras que para nosotros implica la integración urbana y el derecho a la ciudad”, marcó la legisladora Paula Penacca, del FPV.
Mientras, la presidenta del bloque del Frente para la Victoria, Gabriela Alegre, rechazó la iniciativa al sostener que de votarlo, “estaríamos aceptando la asignación de partidas para vivienda sin garantizar el proceso de urbanización, como por ejemplo, el tendido de infraestructura y la apertura de las calles”.
Los proyectos del oficialismo porteño apuntaban, por un lado, a reformar el Código Fiscal para “facilitar el proceso de escrituración para aquellos vecinos que vivan en villas o asentamientos”, y por otro, a cambiar la normativa urbanística para avanzar en la urbanización del barrio Cildañez.
Ambos expedientes, promovidos por los diputados Cristian Ritondo y Karina Spalla, fueron sancionados con 37 votos positivos y 18 en contra durante la sesión ordinaria de la Legislatura.
“El espíritu del proyecto es simplificar los pasos formales que requiere el proceso de escrituración, agilizando las verificaciones necesarias para completar el procedimiento de transferencia del dominio de una propiedad”, explicó Spalla sobre el primer proyecto.
Por su parte, el legislador José Cruz Campagnoli, de Nuevo Encuentro, aseguró: “Nos oponemos a que estas medidas no sean acompañadas por políticas de Estado y sean aisladas y sin ir a fondo al problema en el que es el Estado el que le traslada la responsabilidad a los vecinos”.
En tanto, la legisladora Paula Penacca señaló que “lo que hace que el FpV vote negativamente este proyecto tiene que ver con no haber podido conciliar la concepción política respecto de la urbanización, que queda claro que para el PRO es pensar en ello solo en función de una regularización dominial mientras que para nosotros implica la integración urbana y el derecho a la ciudad”.
Asimismo, quedó aprobada la ley que propone un cambio en la normativa urbanística del Código de Planeamiento Urbano para urbanizar el barrio Cildañez, a través del cual “2.462 familias se convertirán en dueños de sus parcelas y como tales poder gozar de un ambiente digno donde criar a sus familias”, según Spalla.
Para cerrar, la diputada Gabriela Cerruti, aseveró que “este gobierno, desde que asumió, no construyó ninguna vivienda para los sectores vulnerables”.