Antes de llamarse así, el barrio era La Calera , obviamente productora de cal.
Estas tierras pertenecían a don Ramón Francisco Flores, cuando en 1806 fue creado el curato de San José de Flores, que luego fue parroquia, pueblo, partido y finalmente barrio. Unas de las peculiares de este barrio es que cuenta con el atractivo del barrio chino.
