El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, anunció este miércoles una serie de modificaciones para agilizar el proceso de inscripción para adoptar, que incluyen mejorar las evaluaciones, realizar búsquedas más exhaustivas y acompañar de cerca a las familias en el proceso.
“El objetivo nuestro es hacer más fácil todo el trámite de adopción, menos burocrático, pero sobre todo, más personalizado. Es demasiado importante como decisión en la vida, para los chicos, como para que sólo sea un expediente o un número”, sostuvo el jefe de Gobierno.
Rodríguez Larreta destacó que uno de los objetivos es “promover esta concientización para que los padres abran la cabeza a la alternativa de chicos más grandes, con hermanos”, entre otros casos.
Es común que las expectativas de las personas no coincidan con la realidad de la adopción. La mayoría de los aspirantes busca niños muy chiquitos, y el proceso se hace largo y frustrante porque son muy pocos los bebés que necesitan conseguir familias.
La Ciudad busca así que los vecinos puedan ampliar su disponibilidad adoptiva, analizando la posibilidad de convertirse en padres de adolescentes, de niños con alguna enfermedad o discapacidad, de grupos de hermanos amplios o con vinculación con su familia de origen.
“A cada uno de los chiquitos que logramos encontrarles una familia, les cambia la vida. Es importante trabajar cada caso en forma personalizada, pasar de un número de expediente a una relación personal”, enfatizó el jefe de Gobierno porteño.
Es por eso que ahora la inscripción ahora es más fácil ya que el trámite se puede iniciar por internet bajo la modalidad de “Trámites a Distancia”, cargando y completando la documentación requerida. Además, la solicitud de turnos para la inscripción a los Encuentros Informativos y al Registro Unico de Aspirante a Guarda con fines Adoptivos (RUAGA) ya se puede realizar a través del Portal de Turnos del GCBA.
Sobre los encuentros informativos, la presidenta del Consejo de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, Karina Leguizamón, explicó que “ahí contamos lo que es el proceso de adopción, cuáles son los momentos que tienen que vivir y sobre todo cuáles son los niños que están en estado de adoptabilidad”.
A su vez, se reemplazó el legajo de papel por uno electrónico (RLM), más seguro y confidencial, que además agiliza las gestiones y permite búsquedas más específicas, y se pusieron en marcha los Encuentros Informativos, abiertos al público y obligatorios para quienes quieran inscribirse al RUAGA.
También se actualizó la “ficha de disponibilidad adoptiva” que deben completar las personas que se inscriben para informar sobre el perfil del niño para el que se postulan. La ficha ahora diferencia entre situación de enfermedad compensada o no compensada, y de discapacidad con distintos niveles de apoyo, además de que se incorporó el ítem de “flexibilidad”, en el caso de que estén dispuestos a ser convocados aunque su disponibilidad no coincida con la situación en la que se trabaja.
Otro de los cambios es que se creó una herramienta para realizar entrevistas interdisciplinarias en sede y en el domicilio de los postulantes, y se reforzó el trabajo articulado con los hogares convivenciales y dependencias judiciales intervinientes en todo el proceso de adopción.
Por último se armó un equipo especializado en vinculaciones y acompañamiento para seguir de cerca todo el proceso.