Encuentro Interreligioso e Intercultural

La iniciativa la define como “ámbito por el cual la comunidad se compromete, con diálogo y consenso, a consolidar una estructura de valores sostenidos en el reconocimiento de creencias; respeto a la diversidad religiosa y cultural; e integración y convivencia de diferentes identidades culturales para fomentar la solidaridad en pos del bien común y enriquecimiento mutuo en la diversidad”.

La propuesta fomentaría el diálogo y promovería acciones entre diferentes religiones y tradiciones culturales; reconocer, aceptar y respetar el pluralismo religioso y cultural.

Según argumentó la legisladora, la Ciudad “es referencia mundial de una tendencia que invita a olvidar diferencias milenarias y poner el acento en desafíos conjuntos de la fe como novedad”.

Morales Gorleri recordó que luego del atentado a las Torres Gemelas, en 2001, autoridades de distintos credos llamaron a una movilización plural en el Obelisco para que no se confundiera al fundamentalismo con el islam. También, a principios del 2003, tras la ofensiva americana en Irak, jóvenes católicos, musulmanes, judíos y evangélicos instalaron en Plaza de Mayo una carpa invitando a la gente a orar por la paz, bajo el lema “Mano a mano con la Paz”.

“En agosto del 2005, la Iglesia Católica, AMIA, DAIA y Centro Islámico firmaron un histórico documento ratificando la voluntad de luchar contra el terrorismo y fundamentalismo religioso”, agregó.

En el 2014, mediante la Dirección de Cultos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se constituyó la Red Interreligiosa de Jóvenes de la Ciudad de Buenos Aires (RIJBA) para generar y promover un espacio de diálogo y encuentro donde, partiendo de valores comunes compartidos por diversas tradiciones religiosas, se brinde un aporte a la sociedad por medio del diálogo constructivo y acción concreta, llevando adelante acciones solidarias, culturales, ecológicas y cultuales.

“El diálogo interreligioso e intercultural que caracteriza a la ciudad es el instrumento pedagógico que posibilita una convivencia fructuosa”, sostuvo la diputada en fundamentos del proyecto.

Morales Gorleri también consideró: “en un panorama existencial frecuentemente enfermo de violencia muchas veces incoada por fundamentalismos envenenados de exclusión, los valores espirituales deben aparecer como protagonistas de una inclusiva construcción de la paz”.