Cartoneros porteños cuestionan la gestión de reciclado

Las últimas semanas el Gobierno de la Ciudad decidió frenar la implementación del Servicio Público de Gestión Social para la Recolección Diferenciada de los Residuos Secos vigente conforme al contrato emergente del Concurso Público N° 1-SIGAF/2010.

Por ello los cartoneros marcaron estar “profundamente preocupados debido a que si esto se profundiza el Ministerio de Ambiente y Espacio Público va a poner en riesgo sanitario a la ciudad, va a seguir elevando el enterramiento de residuos en los ya colapsados rellenos sanitarios, va a romper con uno de los modelos de gestión social de reciclado más exitosos de Argentina y América Latina”.

“Hace más de diez años las cooperativas somos las que precariamente y con mucho esfuerzo recogemos más del 10% de los residuos que se entierran, en los últimos años fuimos logrando avances que nos permitieron generar mejores condiciones para la limpieza de la ciudad y la situación laboral de los cartoneros, disminuir drásticamente el trabajo infantil en la actividad y garantizar un piso de dignidad para los excluidos”, indicaron.

En este sentido cuestionan que “el ministro a de Ambiente y Espacio Público parece que quiere ponerle un freno y deteriorar lo conseguido, tal vez para intentar reprivatizar el servicio y hacer así negocios con nuestra fuente de trabajo y con el medio ambiente. Estamos convencidos que no vamos a dar ni un paso atrás en todas las conquistas que fuimos consolidando para nosotros y para la Ciudad, no vamos a permitir el incumplimiento del contrato: la seguridad jurídica debe ser para todos, no solo para los grandes empresarios”.

“En cuanto a las deficiencias del sistema, es indignante que algunos funcionarios con altísimos sueldos y todas las posibilidades intenten achacar su propia ineficiencia a los trabajadores de la actividad, sean cartoneros o estatales. En ese sentido, rechazamos cualquier intento de vaciar la DGREC y manifestamos nuestro apoyo a los trabajadores de dicha repartición, agradeciendo sus manifestaciones de apoyo y solidaridad”, añaden.

Según ellos “los problemas del sistema se basan en el constante incumplimiento por parte de la DGREC de las cláusulas del contrato que establecen claramente que es sus responsabilidades. Asimismo, la suciedad que suele verse alrededor de las campanas verdes es consecuencia en primer lugar de la unilateral, sospechosa e improvisada elección del diseño de dichos contenedores totalmente inconvenientes para la correcta prestación del servicio. En segundo, de las serias falencias en la gestión de la DGREC, más ocupada en intervenir políticamente sobre las cooperativas dividiéndolas internamente que por cumplir su función”.

En este marco exigen que siga con “la incorporación de compañeros a la modalidad de recolección por cuadrículas para seguir mejorando las condiciones laborales y de comercialización tal como establece el contrato y las actas complementarias posteriores, evitando la explotación por parte de galponeros privados, muchas veces favorecidos por las políticas de la DGREC. Además, de esta forma podremos mejorar la circulación en la Ciudad, reducir costos innecesarios de trasporte y si la DGREC cumple correctamente su rol, aumentar significativamente la cantidad de residuos recuperados”.

También que “se implemente el ajuste previsto por el contrato porque no es posible prestar correctamente el servicio sin una adecuación razonable de los montos asignados para logística e incentivos”.