Amplio respaldo a las docentes apartadas por el gobierno porteño

Unas cinco mil personas participaron el miércoles del acto para exigir la restitución en su cargo de la maestra y la directora de la escuela del barrio porteño de Flores donde asistía un niño que fue asesinado por su padrastro.

La movilización se dio en medio del paro que realizan los docentes porteños por la misma razón y que tuvo un acatamiento “total” según los gremios.

Padres, educadores, alumnos, gremialistas y legisladores se concentraron frente al establecimiento educativo ubicado en Avellaneda 2555 para respaldar a las dos trabajadoras que el Gobierno de la Ciudad apartó tras el asesinato de Agustí¬n Marrero por parte de su padrastro ocurrido el 9 de junio pasado.

En la movilización se pidió primero justicia por el niño de 5 años y rechazaron de forma contundente la resolución de apartar del cargo para sumariar a la maestra Alejandra Bellini y a Elsa Vincova, directora del JIC 2 del distrito 12 donde asistía el nene.

“Basta de someternos a decisiones arbitrarias de quienes nunca estuvieron en una escuela pública”, indicó el titular del gremio Ademys, Jorge Adaro, en el acto en el que los padres y docentes también tomaron la palabra.

La decisión de apartar a las docentes motivó un paro docente que se realizó en la Ciudad de Buenos Aires con un acatamiento “total”, coincidieron los gremios UTE, ADEMyS, Sedeba y Camyp.

El ministro Bullrich expresó como fundamentación de la medida que Agustín “tuvo tres episodios registrados en la escuela donde llegó golpeado”.

“Estos tres episodios, uno de ellos está justificado por el certificado de un dentista, porque llegó sin dos dientes. Pero los otros no. Y en ningún momento el equipo directivo del jardín dio aviso a los equipos de apoyo”, añadió.