Corridas y heridos durante tiroteo en Tribunales

Momentos de tensión se vivieron el martes por la tarde cuando una jueza laboral, un empleado judicial y un ladrón resultaron heridos durante un tiroteo que se produjo en la zona de los Tribunales porteños.

El hecho comenzó alrededor de las 14.15, cuando un grupo de delincuentes robó una joyería situada en las calles Libertad y Corrientes y comenzó a efectuar disparos de arma de fuego.

Mientras, un agente del corredor turístico de la avenida Corrientes observó estacionada una camioneta Peugeot Partner que le resultó sospechosa y por este motivo se acercó al conductor para pedir la documentación. En ese instante, los integrantes del rodado le dispararon al efectivo, quien en el medio del tiroteo logró pedir refuerzos, mientras que los delincuentes se escaparon por la calle Libertad, doblaron en Lavalle y allí se produjo un nuevo tiroteo con la Policía en Lavalle y Talcahuano, tras lo cual se escaparon nuevamente.

Posteriormente, uno de los ladrones robó otra camioneta para seguir escapando y en la esquina de Paraná y Corrientes, se produjo un nuevo enfrentamiento donde uno de los delincuentes resultó herido de un balazo en el tórax y detenido y el otro logró escapar.

Sin embargo, debido a la gran cantidad de disparos también resultaron heridos de un balazo en la pierna la jueza María Alejandra D’Agnillo (60), titular del Juzgado de Trabajo número 63, y Ezequiel Eduardo Allende (27) empleado del Juzgado Civil número 9.

Al respecto, un comerciante de la zona contó que estaba atendiendo su local, ubicado a metros de Corrientes y Paraná, y de repente comenzó a escuchar los disparos.

“Yo estaba en el negocio atendiendo gente, de repente escucho los tiros, me tiré al piso y después vi dos personas heridas sobre Corrientes que ya fueron trasladadas por la ambulancia”, relató el comerciante.

El hombre dijo que “los disparos duraron como cuatro o cinco minutos”, que “fueron como cuarenta tiros” y que los delincuentes pasaron por la puerta de su negocio cuando huían.

En tanto, Marianela, otra empleada de la zona, comentó que “todo era caos, había corridas, gritos, disparos”. “Se vivió un momento horrible a plena luz de día”.